Hace bastantes años que Matthew Perry ya no está en la primera línea de Hollywood y, sin embargo, sigue siendo una de las caras más conocidas gracias a Friends, serie en la que dio vida Chandler Bing durante 10 largas y exitosas temporadas.
Tras eso, medio mundo se ha puesto de alerta al conocer que el actor ha tenido que pasar por el quirófano de urgencia.
Según el diario Daily Mail, Matthew, de 48 años, acudió al hospital el pasado martes tras sufrir unos fuertes dolores abdominales. Tras las pruebas pertinentes, los médicos descubrieron que causa era una perforación intestinal y que requería una intervención inmediata para evitar males mayores.
Una vez fuera de peligro el actor ha mandado un mensaje agradeciendo "la preocupación de todos" y pidiendo "máxima privacidad" mientras se recupera, destaco El Mundo.
Si bien en los últimos tiempos ha protagonizado algunos episodios de las series The Kennedys After Camelot y The Good Fight, lo cierto es que Perry no ha vuelto a alcanzar nunca los niveles de popularidad de Friends. Los años que trabajó junto a Jennifer Aniston, Courtney Cox o Matt LeBlanc fueron de los mejores de su vida, pero también de los más oscuros. En esa época el intérprete tuvo serios problemas con el alcohol y las drogas y, en 2015, llegó a admitir que fue adicto mientras trabajaba en la serie.
Aunque cuesta reconocer sus peores momentos en los capítulos de la ficción, lo cierto es que llegó a consumir 30 patillas al día y dos litros de vodka. "Soy una persona bastante reservada, pero estaba en un programa de televisión que veían 30 millones de personas. La gente lo sabía y era público lo que me estaba sucediendo", reconoció por aquel entonces. Para solucionar sus problemas tuvo que ingresar dos veces en un centro de rehabilitación en el que fue uno de los mayores esfuerzos de su vida: "No se puede tener un problema de drogas durante 30 años y luego esperar que se solucione en 28 días".
