La verdad de las enchiladas leonesas

Muchas son las veces que me he dado el lujo de comerme unas deliciosas enchiladas, seguramente todos en algún momento hemos compartido o regalado las famosas enchiladitas, pero se han preguntado ¿De dónde provienen? ¿Cómo se elaboran?

El pasado sábado 27 de enero puedo asegurar que viví una de las experiencias más ricas en la historia, y no solamente me refiero a historias ricas en conocimiento sino también en sabor.

El destino fue León, una ciudad colonial que está aproximadamente a unos 93 kilómetros de la capital; llena de historia, volcanes, además de ser el centro agrícola y de comercio de Nicaragua.

León también es una de las ciudades que más turistas recibe en todo nuestro país. Apartando su importante nivel cultural debemos mencionar que su gastronomía es variada y reconocida, no solo por sus deliciosos quesillos sino por poseer una fábrica de enchiladitas.

El destino me unió a la fábrica de enchiladas leonesas “Milagros”. Con más de 20 años en el mercado nicaragüense estas enchiladas se han convertido en un referente a nivel nacional.

Jacqueline de los Ángeles Niño, propietaria del negocio de enchiladas, conversó conmigo para darme todos los detalles de este emprendimiento. "Enchiladas Milagros lleva varios años en el mercado, la empresa inicialmente fue de la abuela de mi esposo, quien se crió a la par de las enchiladas. Hace más o menos dos años que la abuelita no está con nosotros, pero el negocio y su legado siguen de la mano de mi esposo y la mía”, comenta la empresaria.

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La preparación debo confesar no parece algo difícil, pero creo que todo procedimiento realizado con amor resulta ser un éxito.

El primer paso es llevar a el molino el maíz. Jacqueline no pudo darnos toda la receta porque es un secreto familiar, pero pueden sazonarlo con achiote, sal y pimienta.

Luego de eso, se realizan bolitas con la masa y posterior se aplastan como los tostones, para que nos queden como una mini tortilla. Cuando finalicemos lo enrollamos alrededor de nuestro dedo índice para darle forma a nuestra enchilada.

El procedimiento debe repetirse varias veces hasta completar una cantidad necesaria de enchiladas y solo nos queda pasar a las freidoras, ahí se deben dejar aproximadamente siete minutos. ¡LISTO!

Ahora sí es hora de probar y lanzarte tus enchiladas, pero si sos como yo y no te agrada mucho la cocina podés consumir productos Milagros ubicados en León, Managua y Granada.

 

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