Tapices Luis, entrelazando el arte de Nicaragua

Para realizar un tapiz se requiere de mucha labor textil, pues generalmente estas piezas artísticas son de gran tamaño, bordadas o tejidas con mecates o lana combinadas con otras fibras de distintos colores, en la que se reproducen figuras o imágenes tradicionalmente hechas a mano.

En Masaya encontramos Tapices Luis, allí doña Sonia López creció y aprendió a elaborarlos. Cuando tn8.tv le consultó sobre su trabajo, llena de orgullo nos cuenta que para ella “son arte, es elaborado a mano, primero se plasma el diseño en papel craft, se elabora el mecate y éste se tiñe".

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De ese proceso pueden nacer; alfombras de piso de diferentes tamaños, decoraciones de pared con vistosos colores y diseños inspirados en la cotidianidad de nuestro país, como vendedoras de frutas y paisajes pintorescos.

Pero Doña Sonia confiesa a Voces de Éxito que esta idea originalmente no fue suya. “Mi papá es el que hace la técnica de los tapices y hace la invención de los tapices, le podríamos decir en el mundo, porque este tipo de tapices no se hacen en ninguna parte, solamente en Nicaragua”, explica.

Su carta de presentación ha sido la puntualidad en entrega y la calidad del producto, que no se encuentra en otro lugar más que su taller ubicado en el barrio San Juan, del Hospital Viejo 1 cuadra al sur, ½ al este, en Masaya.

La vida para esta trabajadora mujer no ha sido fácil, la sombra de la violencia intrafamiliar opacaba su felicidad, el miedo a morir en manos de su ex esposo era latente y la zozobra habitaba su hogar. “Casi pierdo la vida por él, no podía involucrar a mis hijos porque era peligroso. Como madre no podía yo meterlos, por eso no decía nada, tenía que hacerlo sola con mi otra hija menor que un poco está afectada por todo esto. Caí 3 días grave en cama, tuve que denunciar porque como mujer pues no me podía quedar callada. Eran 13 años de aguantar maltrato y no podía seguir”, comenta esta valiente mujer.

Para salir de ese círculo de violencia el cariño de sus hijos y amistades la hizo ver que merecía ser tratada con respeto y amor, que su vida es valiosa e importante. El apoyo de instituciones también ha sido vital en el proceso de denuncia y superar este pasado triste.

“Si tienen a un marido que las están violentando, hablen, no se queden calladas y hay que hacerlo desde temprano, no esperar a que te lleguen a matar”, enfatizó.

Doña Sonia hoy es una empresaria próspera, sacó a sus cuatro hijos adelante con mucho esfuerzo. En breve espera exportar y sueña con una exposición de sus obras en el Teatro Nacional Rubén Darío. 

Su historia es sin duda inspiradora por lo que se une a nuestras Voces de Éxito.