El número de víctimas mortales por las devastadoras inundaciones que azotaron el centro-sur de Texas se elevó a 52 personas, incluyendo 15 menores. Las autoridades continúan con intensas labores de búsqueda y rescate, ya que aún se reportan decenas de desaparecidos.
En el condado de Kerr, se han recuperado 43 cuerpos: 28 adultos y 15 niños. Otros fallecidos se registraron en Burnet (3), Kendall (1), Tom Green (1) y Travis (4).
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Una de las tragedias más conmovedoras es la desaparición de 27 personas, entre ellas niñas y monitoras, en el campamento cristiano Mystic, ubicado a orillas del río Guadalupe, que fue arrasado por la crecida.
Hasta ahora, han sido rescatadas más de 850 personas, algunas desde árboles y tejados, y muchas permanecen en refugios locales.
El desastre ocurrió el 4 de julio de 2025, coincidiendo con las celebraciones del Día de la Independencia, lo que atrajo a numerosos visitantes y campistas a la región.
Inundaciones relámpago en Texas
Las inundaciones repentinas, causadas por un aumento súbito del nivel del agua, fueron el factor principal. Entre los elementos que agravaron la situación se incluyen:
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Precipitaciones extraordinarias: Hasta 38.1 cm de lluvia cayeron en 12 horas. El río Guadalupe se elevó a 9.9 metros, subiendo 8 metros en 45 minutos.
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Condiciones meteorológicas inusuales: Un vórtice convectivo de mesoescala (VCM) y los restos de la tormenta tropical Barry generaron lluvias extremas.
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Geografía propensa a inundaciones: El Hill Country, con suelos poco permeables y pendientes escarpadas, facilita la acumulación rápida del agua.
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Deficiencias en los sistemas de alerta: Las advertencias llegaron tarde y muchos no recibieron notificaciones a tiempo.
Autoridades locales y meteorólogos coinciden en que es urgente mejorar los sistemas de alerta y pronóstico para evitar futuras tragedias.