Una mujer fue arrestada por las autoridades de San Antonio, Texas, Estados Unidos, tras descubrirse que le compró a su hijo de 13 años armas, municiones y equipo táctico para que cometiera un tiroteo en su escuela.
Según los investigadores, la madre identificada como Ashley Pardo, de 33 años estaba consciente de los planes del menor y lo habría apoyado con la intención de «hacerlo famoso».
El caso salió a la luz el pasado 12 de mayo, cuando la abuela del niño hizo una denuncia alarmante.
Encontró al menor jugando con balas, martillos y un chaleco táctico que, según su testimonio, le habría sido entregado por su propia madre.
También halló un supuesto manifiesto donde el niño detallaba su plan para llevar a cabo el ataque. El joven estudiante estaba obsesionado con pistoleros y masacres escolares.

Equipa a su hijo con armas para atacar su escuela
En abril, fue sorprendido en la escuela buscando información sobre la matanza de Christchurch, en Nueva Zelanda, donde murieron 51 personas. Días después intentó quitarse la vida con una hoja de afeitar, lo que obligó su traslado al hospital. Recibió cerca de 100 puntos de sutura.
A pesar de ese historial, regresó a clases el 7 de mayo. Cinco días después, su abuela descubrió el arsenal. Al registrar su cuarto, la policía halló municiones, símbolos de violencia y hasta componentes que podrían armar un artefacto explosivo improvisado.
El menor fue detenido el mismo día en que llegó a la escuela vestido con ropa de camuflaje, máscara y pantalones tácticos.
Su madre fue arrestada poco después por el delito de apoyo a la comisión de actos terroristas, convirtiéndose en el primer caso de este tipo en el condado de Bexar, Texas.
Según documentos judiciales, Ashley justificó sus acciones como un «intercambio» con su hijo: él cuidaba a sus hermanos menores y ella lo premiaba con artículos militares.
La madre fue puesta bajo fianza, mientras se evalúa si el menor también enfrentará cargos. Las autoridades escolares reiteraron que tomaron las amenazas en serio y actuaron rápidamente para evitar una tragedia.
Ashley enfrenta cargos por colaborar en la comisión de terrorismo.
La audiencia está programada para el 17 de julio, mientras se evalúa la custodia del menor, quien también podría enfrentar cargos penales.