El Centro Técnico de Masaya, referente en la formación técnica y profesional del departamento de Las Flores, ha dado inicio a sus cursos tecnológicos para este año, beneficiando a 4,675 protagonistas con oportunidades de aprendizaje en diversas áreas.
Los cursos abarcan desde tecnologías de la información hasta turismo y oficios tradicionales; ofreciendo formación bajo diferentes estrategias:
– Cursos libres y modulares
– Inglés
– Tecnologías de oficio
– Escuelas de oficio
– Certificación a empíricos
– Competencias laborales EMO
– Capacitación a docentes del MINED
– Emprendimiento turístico
– Escuelas de turismo
– Atención a personas con distintas capacidades
– Aulas TICs
«Creo que esta es una buena oportunidad para estudiar en Masaya. También tenemos la facilidad de aprender y acceder a las herramientas que nos da el Gobierno sandinista para superarnos, en muy buenas condiciones para los que tenemos metas y sueños que cumplir»; dijo Rodrigo Arévalo.
«También para mí es muy bueno y, además, de manera gratuita. Yo vine y me matriculé, fue bien rápido, la atención también es excelente aquí en el INATEC. Igualmente, este ya es el segundo curso que voy a sacar, y también doy las gracias por esas facilidades. Gracias porque antes necesitábamos ir a otro lugar y pagar para recibir estos cursos»; comentó Marcela Marín, desde Masaya.

Infraestructura moderna y equipada en Masaya
Así mismo, para garantizar una educación de calidad, el centro en Masaya cuenta con instalaciones especializadas, entre ellas:
– Laboratorios de computación
– Aula didáctica de hotelería
– Auditorio
– Aulas teóricas
Además, estos programas de capacitación tienen un papel clave en el desarrollo social y económico de Masaya, permitiendo a las familias adquirir nuevas habilidades; mejorar sus ingresos y fortalecer el mercado laboral local.
A nivel nacional, el país ofrece 948 cursos técnicos gratuitos, accesibles en los 153 municipios; con el propósito de mejorar la empleabilidad y contribuir a la erradicación de la pobreza mediante la formación profesional.
De esta forma, el esfuerzo reafirma el compromiso de acercar la educación técnica a más personas; asegurando que la capacitación responda a la realidad económica de cada localidad.
