El embajador de El Salvador, Carlos Antonio Ascencio Girón, visitó el Diamante de las Segovias para conmemorar los 39 años de Monseñor Óscar Arnulfo Romero, quien pasó a otro plano de vida, en el centro escolar que lleva el mismo nombre junto a la comunidad estudiantil.
"Tengo una emoción muy especial al saber que un centro educativo tenga el mismo nombre de Monseñor, este es uno de los encuentros bellos con los estudiantes y docentes, y hay que seguir el ejemplo de ese gran hombre humilde y que entregó la vida por las personas más necesitadas”, manifestó Carlos Antonio Ascencio Girón, embajador de El Salvador.
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Luego se dirigieron a la universidad UNAN-Managua, FAREM-Estelí, donde compartieron con los estudiantes un poco de historia de monseñor que defendió a los pobres y murió por ellos.
“Es muy importante la visita a la universidad del embajador porque eso ratifica el lazo de solidaridad que existe entre El Salvador y Nicaragua. Es un compromiso por seguir luchando por la paz”, dijo Fidel Juárez, vice decano de la FAREM-Estelí.
Luego participó en un evento especial que tuvo lugar en la plaza parque Domingo Gadea, donde disfrutaron de números culturales con la población.
“Se realizó el acto principal en la plaza parque porque aquí está el monumento del monseñor Óscar Arnulfo, donde las familias lo ven cada día y conocen sus historia, tenemos un barrio de la ciudad que lleva el nombre un centro escolar, nos sentimos muy contentos por esta visita”, afirmó el Alcalde de Estelí, Francisco Venezuela.
En este sitio de encuentro familiar y cultural se edificó un monumento en memoria de Monseñor Óscar Arnulfo Romero hace más de dos años, en donde colocaron ofrendas florales.
