Guatemala: Pandillas delinquen por falta de prevención y control

Las pesquisas de la cartera del Interior detallan que actualmente hay 28 células criminales del Barrio 18 y 34 de la Mara Salvatrucha (MS).

Ambas estructuras están constituidas por líderes que están recluidos en las cárceles en Fraijanes I y II, mientras que los mandos medios del Barrio 18 se encuentran en el Centro de Detención Preventiva para Hombres de la zona 18 y los de la Mara Salvatrucha en la cárcel El Boquerón.

La mayoría de colaboradores, sicarios y cobradores de extorsión gozan de libertad, principalmente en el caso del Barrio 18, en tanto la Mara Salvatrucha es una estructura que se dedica a otras actividades ilícitas como tráfico de drogas, armas y personas.

El pasado 17 de marzo un video circuló en las redes sociales, donde aparecieron el líder del Barrio 18, Aldo Dupié Ochoa Mejía; así como los jefes de de las pandillas, Edwin René Ramírez Iboy, Andy Santana García Vásquez y el portavoz de la estructura criminal, Aroldo Cu Mejicanos.

En el video, los sindicados se atribuyen el asesinato de su compañero Oscar Armando Lorenzana Gómez, líder de la pandilla Vatos Locos y a quien acusan de ordenar la explosión contra un bus de San José Pinula.

Ochoa Mejía argumentó que Lorenzana Gómez cometió el delito sin la aprobación de todo el grupo criminal y por eso fue asesinado.

Sin embargo, esas declaraciones reflejan dos problemas graves: el primero la permisividad o complicidad del Sistema Penitenciario de Guatemala para permitir la filmación y el segundo, que los delitos continuarán gestándose desde prisión a través de las órdenes enviadas por sus líderes.

Investigadores de la Policía Nacional Civil de Guatemala refieren que la muerte de Lorenzana Gómez no significa que la estructura que dirigía se desarticuló, pues probablemente quien asumirá el lugar del reo muerto será José Fernando Monzón Ramos, alias “Sniper” o Nicolás Xante Sis, alias “Brown”.

La develación del video del Barrio 18 también refleja otra situación, la falta de políticas públicas para atender a la niñez en alto riesgo.

En uno de los extractos del video, Andy Santa García Vásquez, uno de los miembros de la Rueda del Barrio, es decir uno de los que toma decisiones dentro de la estructura criminal, lee con dificultad la nota que supuestamente dejaron en el cuerpo de Lorenzana Gómez.

No es para menos, García Vásquez, de 27 años, acusado de asesinato y de otros delitos graves, únicamente cursó segundo básico y cuando fue detenido dijo desempeñarse como albañil. El joven residía en la colonia Santa Faz en la zona 6, lugar que ahora es el escenario de extorsiones y muertes violentas ordenadas por él.

Según Leonel Dubón, director de El Refugio de la Niñez, la ausencia de un sistema de protección para los niños, niñas y jóvenes sigue provocando que más menores de edad se involucren con estos grupos.

“La cantidad de pandillas y el crecimiento de sus integrantes tiene que ver con la disminución de las condiciones de protección en el país para la niñez y la adolescencia, esto quiere decir que ante menores factores de protección, mayores factores de riesgo.

Hoy los niños y adolescentes ven al integrarse a una pandilla la forma de encontrar sentido de pertenencia, como consecuencia que el sistema de protección no les está dando otras alternativas”, explica Dubón.

El activista agregó: “El sistema de protección empieza con la familia, la iglesia y la escuela, si no cambiamos este sistema y no mejoramos las condiciones de prevención, seguramente las pandillas seguirán teniendo materia prima para explotar”, asegura el entrevistado.