El alcalde de esa localidad ubicada al occidente del departamento de Caldas, Abel David Jaramillo Largo, expresó que en lugar se trabaja en la evacuación del agua que ingresó a los socavones y en la identificación de los puntos que permitan encontrar a las 17 personas que hasta el momento se reportan como desaparecidas.
Afirmó que como apoyo a los organismos de socorro que se encuentran en la zona, se unirán integrantes de la secretaría de Infraestructura Vial quienes con el apoyo de maquinaria amarilla construirán unos diques para evitar que las minas que se encuentran en el lugar se continúen inundando.
Con relación a las personas desaparecidas expresó que son habitantes de Supía, Marmato, Filadelfia y Riosucio en Caldas y de Quinchía en Risaralda. Los familiares de estas personas no se han movido del lugar esperando noticias de sus seres queridos. Afirman que existe un Dios que permitirá encontrar con vida a sus esposos, tios, padres o hermanos.
El comandante del departamento de Policía Caldas, coronel Luis Duarte, confirmó que el accidente se originó por la falta de energía en el sector que no permitió el funcionamiento de las motobombas, por lo que se inundaron las minas y se presentó un deslizamiento de tierra. Aclaró que las minas funcionaban con el permiso OBQ15462 de la Agencia Nacional Minera.
Con referencia al daño en el suministro de energía en el lugar la Central Hidroeléctrica de Caldas, CHEC, aclaró que el día 13 de mayo recibió un reporte de ausencia de energía en el sector donde ocurrió la emergencia y que los técnicos de la entidad pudieron determinar que el daño ocurrió por una sobre-corriente o cortocircuito ocasionada por demandas excesivas o fallas debidas a la inundación.
Afirmaron que el transformador que estaba alimentando la mina afectada no se encontraba registrado en el sistema de CHEC, ya que fue instalado sin autorización de la empresa y sin el cumplimiento de los requisitos técnicos, es decir, de manera ilegal.
Agencias
