Ser sandinista es ser una persona de corazón humilde, con interés de servir a los demás. Así se recordó en asamblea al general de hombres y mujeres libres Augusto C. Sandino, en conmemoración de los 81 años de su paso a la inmortalidad.
Los asistentes recordaron sus ideales, y la lucha que impulsó por dejar libre a un pueblo oprimido como uno de los legados más grandes que los verdaderos sandinistas deben cumplir.
Darling Omier