La noche en que LeBron volvió a convertirse en Jordan

LeBron James parece citarse con la historia cada vez que salta a una cancha de baloncesto. Ante los Timberwolves el alero volvió a escribir su nombre en la leyenda con un nuevo registro que le ayuda a seguir la estela del fantasma que le persigue desde que comenzó su carrera NBA: Michael Jordan.

El jugador de Akron aprovechó su octavo rebote del partido para superar a Zydrunas Ilgauskas como el máximo reboteador de la historia de la franquicia de Ohio. De esta manera LeBron se convierte en el máximo anotador, reboteador y asistente de los Cavaliers.

Una gesta que en la NBA sólo han conseguido otros dos jugadores. El citado Jordan (Chicago Bulls) y Kevin Garnett (Minnesota Timberwolves) son los únicos jugadores que lideran en estos tres apartados estadísticos en sus respectivos equipos.

LeBron James clavó un disparo de media distancia sobre Jimmy Butler en la agonía del tiempo extra, dándole a los Cavaliers de Cleveland una victoria de 140-138 sobre los Timberwolves de Minnesota el miércoles.

Instantes después que James tapó el lanzamiento de Butler con 1,3 segundos en el reloj, el astro de los Cavs atrapó un largo pase de Jeff Green, generó algo de espacio frente a Butler cerca de la línea de foul y encestó su disparo inclinándose hacia atrás, poniendo fin a la racha de ocho derrotas de Cleveland en un partido televisado a nivel nacional.

Los fanáticos reaccionaron eufóricos mientras James era abrazado por sus compañeros. Fue una importante victoria de los Cavs para apaciguar las tensiones en medio de una prolongada mala racha. Cleveland sólo ha ganado siete de sus últimos 20 partidos.

James terminó con 37 puntos, 15 asistencias y 10 rebotes en 48 minutos. También rebasó a Zydrunas Ilgauskas (5.904) en la lista histórica de rebotes capturados de Cleveland.

Butler firmó 35 puntos y Karl-Anthony Towns añadió 30 para los Timberwolves, que estaban en posición de ganar en el tiempo extra antes de que James acudiera al rescate de Cleveland.

Butler avanzó por la banda izquierda y mandó un tiro corto. Pero James, que había fallado un triple que hubiera sellado el partido en el tiempo regular, lo rechazó y preparó el terreno para el dramático final.

Los Cavs habían perdido sus ocho partidos televisados previos esta campaña, por lo que James dijo la semana pasada tras una paliza que les propinó Houston que los encuentros del equipo ya no deberían ser transmitidos.