En tragedia terminó la celebración a tiros de un hincha de la selección de Argentina por la clasificación en el Mundial de Qatar 2022, en la provincia de Santa Fe.
Según detallan las autoridades, el padre de familia, para celebrar el triunfo de Argentina contra Polonia el pasado 30 de noviembre, disparó a modo de fuegos artificiales y unos de los tiros lo recibió su hijo de 8 años.
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El tiro cayó en una de las piernas del pequeño y, para su fortuna, no comprometió ningún órgano vital; sin embargo, le provocó una enorme pérdida de sangre, por lo que tuvo que ser llevado a urgencias a un centro médico cercano. Y luego, dada la gravedad de su estado, al Hospital Orlando Alassia, ubicado en Santa Fe, capital de la provincia del mismo nombre.
La casa del hombre fue allanada, pero se fugó y permanece prófugo. La fiscal de Argentina que lleva el caso ordenó el arresto. El crimen se encuentra en manos de la unidad de Homicidios Dolosos del Ministerio Público de la Acusación, MPA.
Sangrienta celebración de un hincha de Argentina
En la casa la Policía no halló armas de fuego ni tampoco material balístico; pero sí 18 plantas de marihuana, además de 345 gramos de la droga.
De acuerdo con el informe médico, el niño recibió un balazo que ingresó por la parte izquierda de la región lumbar y quedó alojado en el muslo.
El niño llegó al hospital acompañado por su madre y los cirujanos. Además de extraer la bala, constataron que el proyectil no hubiera dañado ninguno de los órganos vitales. También se descartaron lesiones óseas, vasculares o nerviosas por el impacto del proyectil.
Según las autoridades de Argentina, el menor se encuentra fuera de peligro, en un área dedicada a cuidados mínimos.
La Policía de Argentina se encuentra coordinando nuevas medidas de control y búsqueda en Santa Fe y Santo Tomé, la ciudad donde sucedieron los hechos para dar con el hombre prófugo.
