Al menos 30 efectivos de la Marina Armada de México fueron detenidos por su vinculación con la desaparición forzada de varias personas en 2014 Nuevo Laredo, en el estado fronterizo de Tamaulipas.
Un juez federal giró las órdenes de aprehensión contra los efectivos militares imputados por el delito de desaparición forzada de personas, por lo que la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) entregó a su personal a la Fiscalía General de la República (FGR).
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A través de un comunicado, la Semar informó que los 30 efectivos detenidos están vinculados con una cadena de al menos 25 desapariciones de personas en Nuevo Laredo en el año 2014, cuando un grupo especial de la Marina fue asignado a dicha ciudad fronteriza para combatir a diversas células del crimen organizado.
La desaparición de al menos 25 personas estaba siendo investigada por la FGR y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Treinta militares de la Marina Armada de México fueron detenidos por la Fiscalía General para ser investigados por la desaparición de distintas personas en Tamaulipas. ???#Militares #tamaulipas #Fiscalía #Mexico https://t.co/H6A43aOkI6
— Diario El Heraldo (@diarioelheraldo) April 13, 2021
De acuerdo con la Semar, los 30 elementos navales fueron puestos a disposición de la FGR desde el pasado 9 de abril, sin aclarar si ya se había realizado la audiencia inicial para imputar a los marinos.
La Marina Armada, no precisó si todos son elementos activos, explicó que decidió entregar a los uniformados para que el personal de la Fiscalía "realice las investigaciones pertinentes".
Esta es la mayor captura de militares señalados de desaparición forzada que se conoce en los últimos años en México.
Desaparición forzada
Según datos oficiales, Tamaulipas es el segundo estado de los 32 mexicanos con mayor reporte de desaparición forzada: la cifra acumulada hasta enero supera las 11.300.
La mayor parte de las desapariciones, de acuerdo con las denuncias, ocurren en las carreteras que conducen hacia Estados Unidos y son atribuidas a narcotraficantes, pero también han sido acusadas fuerzas del orden, sobre todo policías estatales y municipales.
