Asesinaron arrodillados a 7 jóvenes en la Masacre de Colón, Panamá

jovenes asesinados

La investigación sobre la masacre de Colón revela que cinco de los siete jóvenes fueron ejecutados cuando estaban arrodillados y de frente a la pared del antiguo Bunker de Espinar

El portal Panamá Press reportó que uno de los sobrevivientes declaró que, supuestamente, el imputado Miguel Almanza, de 18 años, le dijo a un sujeto enmascarado, que lo acompañaba, que le metiera un "pepazo" al grupo de jóvenes de Valle Verde, curiosamente, el mismo sector de donde él es oriundo.

En la audiencia, el fiscal David Medina explicó la narración de uno de los sobrevivientes y citó una frase que se le atribuye a Miguel. El sobreviviente testigo dijo que se estaban bañando en el lago cuando llegaron dos muchachos, uno con el rostro tapado y el otro no.

Lo primero que dijeron apuntándoles fue: '¡Salgan del agua, denme sus celulares!'. La persona que tenía el arma de fuego empezó a buscar entre algunas de las pertenencias. Miguel ya se había apoderado de un machete que estaba en el lugar y en eso dijo: '¡Métele un pepazo! ¡Métele un pepazo (disparo)! ¿Dónde están los celulares?'. El de la cara tapada pregunta: '¿Quiénes son de Valle Verde? Se van con nosotros', destaca Panamá Press.

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Los de Valle Verde eran las hermanas Azucena y Yulissa Martínez Daley

Dentro del bunker fueron encontrados los cuerpos de Santiago, Leydis, Yeleny, Bladimir y Édgar.

En un sendero ubicado a 93 metros estaban los cuerpos de Azucena y Yulissa. No se sabe si las hermanas intentaron huir. Una de las chicas -a diferencia del resto- tiene tres disparos: dos en la espalda y uno en la cabeza.

Para la matanza se utilizó una sola arma de fuego.

Esa antigua instalación militar formó parte del complejo de la Escuela de las Américas, durante la permanencia del Comando Sur de Estados Unidos, en esa región de Colón.

Un tribunal de apelación tomó la decisión de mantener la medida preventiva en contra de Miguel Almanza.

El joven de 18 años de edad es el único sospechoso de los asesinatos de siete jóvenes perpetrado en un antiguo búnker de tropas norteamericanas, en un área boscosa de Espinar, en la costa atlántica.

La decisión del tribunal se dio luego de haber valorado los elementos de convicción que presentó la Fiscalía de Homicidio y Femicidio de la Regional de la provincia de Colón.