Desalojo de embajada venezolana desmontó cerco mediático de EEUU

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El ingreso ilegal de fuerzas policiales estadounidenses para desalojar a los activistas que defendían la embajada de Venezuela en Washington desenmascaró el cerco mediático y la asfixia económica de Estados Unidos (EE.UU.) contra el país suramericano, de acuerdo con analistas.

El pulso por la misión diplomática sostenido entre un grupo de antichavistas y el colectivo de activistas “se convirtió en una especie de simulación en HD (o 3D) de la guerra de Estados Unidos contra Venezuela”, manifestó Bruno Sgarzini en un artículo publicado el jueves en el sitio web Misión Verdad.

“En vivo y en directo, el público estadounidenses observó como su propia gente era tratada de la misma forma que en este momento son tratados los venezolanos, más allá de su posición política”, detalló Sgarzini.

Afirmó que el colectivo que -con autorización de diplomáticos venezolanos– protegía la embajada desde abril pasado logró un cambio en la opinión pública.

 

Pues -sostuvo- los opositores venezolanos que asediaron la legación diplomática querían hacerse pasar como un grupo “de lucha contra la dictadura y en defensa de los derechos humanos”, pero devinieron en golpeadores de ciudadanos estadounidenses.

El articulista opinó que el asedio que los antichavistas cometieron contra la embajada venezolana en Washington se convirtió en una representación del bloqueo económico impuesto unilateralmente por EE.UU. contra la nación suramericana.

 

Asimismo, Carlos Vecchio, que se identifica como representante diplomático del autodenominado presidente interino venezolano, el diputado Juan Guaidó, dilapidó “el poco prestigio que habían obtenido en la opinión pública a favor de su innoble causa de cerco y asfixia contra Venezuela”, externó.

Sgarzini dijo que algo que “descolocó por completo” a Vecchio fue que la discusión comenzó a pasar por la división entre quienes están a favor y en contra de una guerra en Venezuela.

En este sentido, sostuvo que con la toma de la misión diplomática terminó por cumplirse “el sueño húmedo de Juan Guaidó (…) Estados Unidos, finalmente, invadió Venezuela, sin que payasos como su representante en Estados Unidos, Carlos Vecchio, pudiera haber evitado con su gente, el mal trago de ver las fotos de oficiales del Servicio Secreto en la embajada”.