Sospechoso por masacre en Brasil niega participación directa

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Un adolescente de 17 años, investigado hoy por su supuesta participación en la masacre en una escuela de Sao Paulo perpetrada por dos de sus amigos, negó su participación directa en los asesinatos.

El delegado general de la Policía Civil de Sao Paulo, Ruy Ferraz Fontez, responsable de las investigaciones de la matanza en el centro escolar Raúl Brasil en el municipio Suzano, afirmó que el joven rechazó el compromiso directo con la brutal acción del miércoles, pero qué desconocía el por qué no fue incluido por las dos amistades.

'No sabe decir por qué no fue invitado y esperaba haber sido invitado', dijo Ferraz Fontez durante una entrevista divulgada por TV Globo.

Por segunda vez el Ministerio Público de Sao Paulo interrogó al exalumno del colegio, aún sin dar a conocer su nombre.

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En el testimonio, el joven reiteró que Guilherme Monteiro, de 17 años, y Luiz Henrique de Castro, de 25 años, autores del ataque y muertos en la acción, habían comentado sobre el deseo de realizar un atentado en una escuela.

Según la policía, el adolescente investigado sugirió a los dos amigos que utilizasen bombas y explosivos, pero que no colaboró con la acción. Él es investigado como un posible tercer elemento detrás de la masacre que dejó 10 muertos, informo Prensa Latina. 

La policía también realizó búsquedas en su casa y encontró cojines muy parecidos a los utilizados por Monteiro y De Castro, además de anotaciones en código.

Ferraz Fontez pidió la aprehensión del tercer sospechoso, pero la fiscalía concluyó que no había indicios suficientes y esperaría la conclusión de la investigación.

'Él tenía conexión directa con toda la planificación, ayudó a iniciar toda la ejecución y no participó en la acción. Es muy peligroso, desde nuestro punto de vista, dejarlo en libertad', argumentó el comisario.

Brasil registra la tasa anual de homicidios más alta de mundo, pero no resulta habitual que ocurran en escuelas. En 2011, 12 estudiantes murieron a manos de un pistolero que recorrió los pasillos de un centro educativo en Río de Janeiro.

De las 10 muertes registradas en el caso de Suzano dos eran trabajadoras de la escuela, cinco alumnos, el tío comerciante de uno de los asesinos y ambos agresores, que se suicidaron cuando se vieron acorralados por la policía.

Unas 11 personas se reportan heridas, dos de ellas con peligro para sus vidas.