Honduras sanciona ley para crear una policía libre de criminales

Honduras sancionó este lunes una ley de policía para crear una nueva institución libre de efectivos implicados en carteles de narcotraficantes y pandillas.

El presidente Juan Orlando Hernández sancionó la ley en una ceremonia, con el cometido de mejorar la seguridad en Honduras, que ha sido catalogado como uno de los países más violentos del mundo.

Con la legislación "se inicia una nueva era" para la policía, declaró a la prensa Omar Rivera, miembro de una comisión que depuró de la institución a 4.374 efectivos, la mayoría por sospechas de pertenecer al crimen organizado.

Con la ley, "la policía contará con una renovada estructura organizacional y un nuevo régimen disciplinario", añadió Rivera, miembro de la Comisión Especial para la Depuración y Transformación de la Policía.

Movilización de policías y cuerpos de auxilio por un motín en una cárcel mexicana (VIDEO)

La Comisión fue creada en abril de 2016 luego de que el Congreso decretó una "emergencia en seguridad" cuando la fiscalía comprobó que miembros de la cúpula dirigieron el asesinato del zar antidrogas Arístides González en 2009 y el asesor de seguridad Alfredo Landaverde en 2011.

La aprobación de una nueva ley de policía por el Congreso forma parte de las recomendaciones de la comisión, que evaluó a cerca de 9.500 miembros de la institución.

 

En contexto
Honduras: Pandilleros matan a dos jóvenes tras gritarles “Feliz Navidad”

Dos jóvenes parientes fueron ultimados por supuestos pandilleros que los sorprendieron a tiros cuando platicaban amenamente sobre el último resultado obtenido por la selección nacional de fútbol de Honduras, en un callejón de la colonia “Policarpo Paz García”, al norte de Comayagüela.

Los fallecidos son: el zapatero César Alef Lara Ávila y su primo, Kilder Ariel Alvares Ávila, con oficio vendedor de lácteos para una reconocida empresa, ambos residentes en la zona donde perdieron la vida de múltiples disparos.

El parte policial indica que alrededor de las 9:30 de la noche, los jóvenes se encontraban fuera de su casa platicando como frecuentemente solían hacerlo. De repente a la zona llegaron varios hombres, con “pinta de mareros”, fuertemente armados con fusiles y pistolas automáticas, señaló La Tribuna.

Los malvivientes al ver a los dos muchachos les gritaron “Feliz Navidad” y enseguida comenzaron a descargar sus armas contra la humanidad de los dos parientes.

Fue tanta la saña de los malvivientes que después de matar a los dos jóvenes se acercaron a uno de los cadáveres tirados en la calle y volvieron a disparar contra su cuerpo, recibiendo más de 50 heridas de bala.