Comer rápido podría traer consecuencias graves

En el mundo ocupado de hoy en día, muchas personas comen rápido y ocupados. Sin embargo, nuestro cerebro necesita tiempo para procesar las señales que nos indican que estamos satisfechos.

De hecho a nuestro cerebro le toma 20 minutos para darse cuenta que nos encontramos satisfechos. Cuando se come rápido es mucho más fácil comer más comida de la que realmente necesitamos, con el tiempo el exceso de calorías ingeridas nos lleva a aumentar de peso.

Comer rápido no sólo puede aumentar el riesgo de presentar problemas de obesidad o sobrepeso, sino que también está asociado a otros problemas de salud, entre los que se incluyen:

Resistencia a la insulina: Comer rápido ha sido asociado a un mayor riesgo de presentar resistencia a la insulina. Esta condición caracterizada por niveles elevados de azúcar e insulina en sangre  es la antesala para presentar problemas de diabetes tipo 2 y síndrome metabólico.

Mala digestión: Las personas que comen rápido generalmente presentan problemas de gastritis, colitis, reflujo y sensación de pesadez. Debido a que comen grandes bocados de comida y no lo mastican lo suficiente, lo que hace que esta primera etapa de la digestión que inicia desde nuestra boca no se complete.

Menor sensación de llenura: Al comer muy rápido las personas se sienten mucho menos satisfechas con lo que consumieron, lo que los lleva a comer más y no disfrutar de sus comidas.

¿Cómo podemos lograr comer más despacio?

Comer más despacio brinda muchos beneficios para la salud. Este sano hábito aumentará sus niveles de hormonas de saciedad, lo ayudará a sentirse más satisfecho y disminuirá su ingesta de calorías. Además, puede mejorar su digestión y aumentar el disfrute de sus comidas.

Si usted desea comer más despacio estas son algunas técnicas que lo pueden ayudar:

No coma enfrente a pantallas: Comer al frente de televisores, computadoras, celulares o cualquier otra distracción lo puede llevar a comer más rápido y de forma inconsciente. Esto también lo hace perder la cuenta de cuánto  ha comido y qué ha comido. ¿A quién no le ha sucedido esto comiendo  palomitas en el cine?

Coloque su tenedor en la mesa entre cada bocado: Esto le ayudará a comer más despacio y disfrutar más de cada bocado.

No llegue a comer con mucha hambre: Cuando tenemos mucha hambre tendemos a comer mucho más rápido y no prestamos atención a lo que comemos. Para evitar que esto suceda es importante hacer pequeñas meriendas entre las comidas principales.

Mastique muy bien los alimentos: Procure masticar cada bocado entre 20 a 30 veces antes de tragarlo.

Consuma alimentos altos en fibra: Los alimentos altos en fibra como las frutas y los vegetales le brindarán mayor sensación de saciedad y harán que deba masticarlos más.

Coma en pequeños bocados: Esto le ayudará a disminuir la velocidad con la que come y a disfrutar más de sus comidas.

Coma de forma consciente: Esta es una excelente herramienta para ayudarlo a comer más despacio, el principio fundamental detrás de este hábito es poner mucha atención a todo lo que come. 

Comer rápido es una práctica muy común en el mundo acelerado de hoy, esto le ahorrará unos cuantos minutos durante el día pero puede generarle diversos problemas de salud.

Comer más despacio requiere de práctica y paciencia, sin embargo, los beneficios para nuestra salud son muchos. Coma más despacio y disfrute de cada bocado.