Gasta los ahorros de su vida porque cree que va a morir y sucede lo inesperado

reino unido

¿Se imagina que un doctor calcula por error que le quedan entre cinco y siete años de vida? Eso le sucedió a Jackie Dibb hace dos años en un hospital de Yorkshire (Reino Unido).

Cuando tenía 60 años de edad, a la mujer le diagnosticaron una enfermedad neurodegenerativa, así que decidió emplear sus ahorros en disfrutar de sus últimos días, informa este viernes el periódico Daily Mail.

"Gastamos montones de dinero" de un fondo de pensiones con alrededor de 10.000 libras esterlinas —alrededor de 14.000 dólares— "comprando cosas innecesarias", desde reformar la casa hasta unas vacaciones familiares a Turquía, detalla su esposo.

Posteriormente, el centro sanitario donde atendieron a Jackie Dibb les envió una carta en la que explicó que la sexagenaria no tenía ninguna enfermedad, sino que sus molestias físicas —que incluían perdida de memoria, dolores de cabeza y fatiga— eran fruto de que padecía depresión y ansiedad.

 

Hoy en día, el matrimonio atraviesa una crisis económica, ya que Robert Dibb abandonó su trabajo para cuidar de su cónyuge a tiempo completo. A pesar de todo, la pareja no realizará ninguna demanda puesto que estima que "han sido muy buenos" con ellos a lo largo de estos años.

En la pareja no solo del amor se vive, sino que siempre es importante tener una tranquilidad financiera para evitar discusiones que pueden terminar con separaciones o en malos momentos. Como recomendación hay que saber administrar el dinero en la pareja.

Creen una visión compartida del dinero. Para administrar el dinero correctamente, es necesario que ambos se fijen objetivos comunes como por ejemplo el ahorro para comprar una casa, un coche e incluso para realizar un viaje. Si ambos tienen el mismo pensamiento, seguramente les va a ser sencillo encontrar el equilibrio financiero y van a poder manejar el dinero más simplemente.

Creen cuentas de ahorro o de cheques por separado. Una excelente idea es que cada miembro de la pareja tenga su propia cuenta de ahorro o de cheques para manejar sus propias finanzas. De esta manera se logra un mejor y más eficiente equilibrio monetario.

Consideren que ambos son iguales. Tengan en cuenta que las tareas de ambos son igualmente importantes, pues cada una de ellas aporta una cantidad significativa de dinero sin importar que uno gane más que el otro.