Estos son los regalos que Donald Trump y el papa Francisco intercambiaron

El líder de la Iglesia católica no se salió del libreto al presentar sus obsequios al presidente estadounidense, quien llegó con varias ofrendas para el anfitrión.

La esperada reunión entre Donald Trump y el papa Francisco concluyó este miércoles, como indica el protocolo, con un intercambio de regalos marcado por un tono de cordialidad, en el que los líderes mundiales presentaron varios obsequios relacionados con la paz.

El sumo pontífice le entregó al estadounidense un emblemático texto sobre la paz y un medallón dedicado al mismo tema, durante su encuentro privado en el Vaticano.

El documento, que lleva el título "La no violencia: estilo de una política para la paz", escrito por el papa argentino con ocasión de la Jornada Mundial de la Paz 2017, fue entregado personalmente por el pontífice al mandatario estadounidense. También, como suele realizar Francisco ante las visitas de Estado, entregó a Trump sus tres escritos principales: las encíclicas Evangelii Gaudium y Laudato Si y la exhortación Amoris Laetitia.

El presidente le dijo al Papa al recibir sus escritos: "Los leeremos".

Posteriormente, Francisco le ofreció el detalle más significativo: una medalla de bronce con una rama de olivo, un símbolo de paz, que crece entre una piedra partida.

"Espero que sea un instrumento de paz", le dijo en español el Papa a Trump, al término de una audiencia de media hora en el estudio privado del pontífice en el palacio apostólico.

 

"Necesitamos paz", le contestó en inglés el mandatario.

A su vez, Trump le regaló a Francisco una serie de libros, todos ellos de Martin Luther King, el pastor estadounidense que desarrolló una labor crucial en los EEUU al frente del movimiento por los derechos civiles para los afroestadounidenses. "Creo que le va a gustar. Lo espero", le dijo Trump.

Según la Casa Blanca, entre los obsequios presentados por el mandatario al pontífice se encuentra una colección de los cinco libros escritos en vida por King. Incluso, uno de esos libros, The Strength to Love (1963), lleva la firma del destacado activista.

Además, Trump también le regaló al Papa una pequeña pieza del monumento de granito en honor a King situado en Washington, en homenaje a la "esperanza, la visión y la inspiración" del activista" para las generaciones venideras", de acuerdo con la Casa Blanca.

Junto con los libros y la pieza del monumento, se entregó también una fotografía del discurso que el Papa ofreció ante una sesión conjunta del Congreso de los EEUU en septiembre de 2015, y en el que celebró el legado de King.

Por otro lado, Trump le obsequió al Papa una escultura de bronce hecha a mano por un artista estadounidense no identificado y que representa "la esperanza en un mañana pacífico" al evocar "dos valores universales: la unidad y la resistencia".

El primer encuentro entre los dos líderes generó muchas expectativas por sus muy diferentes posiciones sobre temas como migración, cambio climático, venta de armas, pena de muerte e islam.

El Papa, que al inicio del encuentro parecía serio, apareció luego cordial y sonriente, y llegó hasta bromear con la esposa de Trump, Melania. "¿Le das de comer potizza?", le preguntó con buen humor, en referencia a un tradicional dulce de Eslovenia, tierra natal de la primera dama.