EE.UU: Hombre confiesa haber asesinado a su madre en Sweetwater

El hombre de 32 años condujo hasta el Departamento de Policía de Miami-Dade y se acercó a varios oficiales parados en el estacionamiento del lugar para confesarles su crimen.

“Hice algo terrible”, fue lo primero que le dijo Joaquín Villagra a la policía, según el reporte al que tuvo acceso el Nuevo Herald.

Villagra, buscado por la policía desde la semana pasada, dijo que fueron probablemente las drogas que lo llevaron a matar a su madre. Lisbeth Sándigo, de 54 años, fue encontrada sin vida el jueves 14 de julio en el apartamento ubicado al 10792 del Suroeste y la Quinta Calle, en Sweetwater. Ambos vivían en la residencia.

De acuerdo al informe policial, el cuerpo de Sándigo fue encontrado por el encargado del condominio, que ingresó al inmueble a pedido de los familiares de la víctima que estaban preocupados porque la mujer no atendía el teléfono o la puerta desde el 11 de julio.

El cadáver estaba recostado parcialmente sobre su cama, “la cara de la víctima estaba cubierta por una almohada con manchas de sangre. Tras quitar la almohada se pudo observar restos de espuma y sangre en la boca de la víctima”, dice el reporte.

“Una observación de las manos de la víctima reveló que tenía largos pelos que parecían consistentes con los de la barba de un hombre”, continúa la documentación.

Villagra dijo que el día del incidente él volvió a su casa pasadas las 6 p.m., luego de haber consumido cocaína. Al entrar, su madre lo confrontó sobre su abuso de las drogas, porqué volvía siempre tan tarde, y el hecho de que estaba desempleado.

Lo último que recuerda el hombre tras la discusión es que entró al cuarto de su madre y luego se desmayó.

“Fui muy malo. Estaba extraño, raro. No era el mismo”, dijo Villagra en el reporte.

Cuando despertó, Villagra se llevó la tarjeta de crédito de Sandigo y las llaves de su automóvil, un Toyota Corolla del 2005. No volvió a aparecer hasta que se entregó a la policía.

La policía dijo que las fibras de pelo recolectadas de la escena del crimen probablemente pertenecen a la barba de Villagra, quien además tenía marcas de arañazos en el rostro al momento de su arresto. Se desconoce exactamente cómo Villagra asesinó a su madre, ya que dice no recordar por completo el hecho.

El hombre ha sido acusado de asesinato en segundo grado con un arma mortal. Villagra compareció ante un juez, donde se le ordenó permanecer detenido sin opción a ser liberado bajo fianza.

Algunos vecinos le dijeron a Univision que la víctima era de origen nicaragüense.

La administradora del edificio, quien fue identificada solo como Elcy, describió a Sándigo como “una mujer maravillosa, una mujer educada, una mujer trabajadora”.