Con una herida alrededor del cuello fue encontrado el cuerpo de Gerald Francisco Vanegas Urbina de 26 años, en una calle de la zona ocho de Ciudad Sandino, municipio de Managua.
Se presume que el cuerpo fue tirado en este sitio, pues en la zona no había evidencias de ningún tipo de altercado ni sangre de semejante herida que tenía.
Pobladores de la zona aseguraron que no escucharon nada durante la madrugada; aunque esa zona es peligrosa. «Son varias cuadras en las que después de las cinco ni los mismos de aquí podemos pasar, pues te asaltan y sino te dejas te puyan.», dijo uno de los habitantes.
Es por eso que se cree que de algún lado lo llegaron a poner para despistar el lugar y los motivos del horrendo crimen.
El occiso era habitante del barrio Cuatro de Abril en Mateare, quien deja a dos niños en la orfandad, uno de tres años y otro de ocho meses. Este se dedicaba a la albañilería y salió a trabajar el domingo sin volver a su casa ni dar señales de vida.
Con lágrimas en los ojos, fue su propia madre quien reconoció el cuerpo de su vástago por medio de una fotografía. Se encontraba consternada y no se explicaba quien o por qué tuvieron que ensañarse de esa manera con su hijo.
La Policía Nacional ha iniciado las investigaciones del macabro hecho, que se presume haya ocurrido a eso de las dos o tres de la madrugada de este martes. Con ayuda de la técnica canina están trabajando unas posibles huellas para dar con el paradero y la identidad del o los responsables de este asesinato.
El cuerpo fue llevado al Instituto de Medicina Legal, donde por medio de la autopsia se darán a conocer las verdaderas causas del deceso y que así su familia pueda brindarle cristiana sepultura.
